Esta es nuestra primera salida. Participamos 4 integrantes del Grupo, Rayda, Josep, Puerto y Fermin. Ana y Xevi no pudieron venir, a ver si en otra ocasion.
Cuando llegamos, el Castillo estaba cerrado, asi que nos fuimos a dar el paseo previsto. En el mapa se puede seguir la ruta que hicimos, sin desniveles dignos de reseñar. La mañana, aunque fresca, era esplendida, de un sol radiante, muy clara, nos permitia divisar el Pirineo levemente nevado. Fue una caminata larga y tranquila, mas propicia para la charla animada que para hacer un ritmo fuerte. De eso se trata, de disfrutar del paisaje y los amigos...
De vuelta al Castillo, nos unimos a una visita guiada. El edificio esta bien mantenido, hay que tener en cuenta que fue habitado por los ultimos propietarios hasta hace algunos años. La verdad, desde fuera no parece tan grande como se ve por dentro. Hay una terraza trasera, con zonas distintas para hombres de mujeres, muy fresca, que solo puede visitarse en verano (a tener en cuenta por si se quiere visitar)
Hay un documental multimedia que es opcional, muestra la historia del Castillo narrada por el perro del dueño. La verdad, es mejor pasar...
Alrededor hay unos prados muy cuidados, interesantes si se va con crios o animales, para corretear.
Luego, cerramos el dia aterrizando en Vila-Seca a comer en la Fonda del pueblo. La comida es casera, de verdad vamos, nada especial pero bien hecho, 3 platos y postre, servido por la familia. Siempre esta lleno y tuvimos que esperar. Luego nos quedamos charlando hasta que cerramos el restaurante. Como siempre que la conversacion es amena...
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